Nadie puede negar que hay momentos en los que las ganas de contacto carnal se vuelven casi incontrolables y para entonces, podemos recurrir a muchas tácticas de ligue o a llamarle al ex con el que nos dimos amor aún después de terminar la relación, o incluso a contratar los servicios sexuales de alguien.
Todo lo anterior está muy bien mientras todas las partes involucradas estén de acuerdo, pero ¿usar a un cachorro como moneda de cambio? Hay que aceptar que eso sí está un poco raro y podría resultar bastante cuestionable, pues no se sabe si, en caso de aceptar el intercambio, el receptor se haría cargo de cuidarlo como debe.
Aunque parezca una broma, hay un grupo de imágenes publicadas en Twitter que parecen dar muestra de que una situación así ocurrió en la vida real. En los screeshots puede verse una conversación entre dos usuarios de Grindr (app de citas para hombres gays y bisexuales); uno de ellos le pregunta al otro “cuánto cobra” y al recibir la respuesta admite que no tiene dinero para pagarle.
De inmediato, el usuario que se nombra “agosexoxdinero” intenta despedirse (probablemente pensando que el acuerdo no llegará a ningún punto); ante la negativa, el otro hombre se muestra decepcionado, lo que hace que el primero le ofrezca sus servicios por una cantidad más baja.
Justo cuando el precio por el encuentro sexual ha bajado, el profesional destaca que también acepta “cosas de valor”. Entonces su interlocutor se muestra aún más interesado y sin dudar, declara que tiene cachorros chihuahua para dar a cambio de sexo.
Como dicen por ahí: “El que no enseña no vende”. Entusiasmado, el dueño de los cachorros le envía un par de fotos de los perritos y detalla que los ejemplares son “cabeza de manzana”. Sin esperar más, el trabajador sexual acepta la oferta y comienzan a concertar la cita.
Hasta el momento no se conoce el lugar en donde ocurrieron los hechos y tampoco se sabe el desenlace de la historia.
